Hoy comienza la Semana Mundial de la Lactancia Materna. Desde el 1 hasta 7 de agosto esta campaña mundial pretende crear conciencia y estimular la acción sobre todo lo que gira entorno a esta práctica. Asociaciones, plataformas, grupos de apoyo y entidades vinculadas con la salud se suman a esta celebración para poner el foco en la importancia de dar el pecho.
Su principal impulsora es la Alianza Mundial para la Acción de Lactancia Materna, WABA, por sus siglas en inglés, que ha escogido como lema para este 2024 Cerrando la brecha: apoyo a la lactancia en todas las situaciones. Durante este año, la conmemoración pretende poner el foco en la importancia de que todas las madres que así lo deseen puedan amamantar con éxito a sus hijos, independientemente de las circunstancias en las que se encuentren. No podemos olvidar que, alrededor del mundo, las crisis sanitarias, la emergencia climática, así como los conflictos armados dificultan esta práctica.
La lactancia, una práctica imprescindible:
La lactancia materna es la mejor fuente de nutrición para los recién nacidos, puesto que aporta todo lo necesario para crecer sanos y fuertes. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que los bebés sean amamantados exclusivamente durante los primeros seis meses de vida y, a partir de ese momento, introducir una alimentación complementaria mientras se continua dando el pecho hasta los dos años, aproximadamente.
Sin embargo, pese a las recomendaciones de la OMS, los datos muestran que el índice de abandono de la lactancia durante las primeras tres semanas es excesivamente alto y, entre las causas que justifican estas estadísticas podemos encontrar la falta de información y apoyo que reciben las familias.
La sociedad, un pilar fundamental para normalizar la lactancia
Pese a que es una práctica completamente natural, a día de hoy todavía existen muchos prejuicios y tabúes entorno a la misma que, a la larga, provocan que las madres opten por otras alternativas para alimentar a sus hijos. Además, en muchos aspectos, la sociedad no está preparada para que la madre pueda amamantar de forma continuada sin ninguna interrupción.
La reincorporación al trabajo después de terminar la baja por maternidad, con la incompatibilidad de horarios que supone, la ausencia de salas de lactancia o lugares donde poder extraerse leche o las miradas alarmadas de quienes ven a una mujer dando e pecho en público a su hijo dificultan mantener una lactancia exclusiva.
En este sentido, los grupos de apoyo y las asociaciones pro-lactancia cumplen un papel fundamental a la hora de desarrollar servicios informativos y Der
apoyo dirigidos a todas las mujeres que desean amamantar a sus hijos, basado en la metodología de «apoyo entre iguales» o «de madre a madre».
Matermap y la lactancia
Durante esta semana, desde MaterMap queremos profundizar aún más en la lactancia. Desmontaremos mitos, os daremos consejos y tips para sobrellevarla. Además, en nuestras redes sociales tendremos muchas sorpresas para todos vosotros así que ¡no os perdáis nada!
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