A lo largo de nuestra vida el cerebro produce naturalmente oxitocina en momentos de placer. Durante el embarazo y el posparto esta hormona juega además un papel crucial. ¿Quieres saber por qué? Lee este artículo, desde MaterMap te lo contamos.
Durante el embarazo la producción de oxitocina es fundamental. Entre las funciones en las que interviene se encuentran algunas tan importantes como la estimulación del crecimiento del útero y su mantenimiento en estado óptimo. Además de mantener al bebé en una posición correcta para el parto.
En el momento del nacimiento la oxitocina es la principal encargada de estimular las contracciones uterinas, que el bebé se mueva hacia abajo en el canal del parto y se dilate el cuello uterino. ¿Esto qué quiere decir? Pues que la intensidad y frecuencia con la que el cerebro produce esta hormona hacen que aumenten las contracciones.
Asimismo, la conocida «hormona del amor», actúa como estimulador natural en la producción de las endorfinas. Estas son analgésicos naturales que produce tu cuerpo y consiguen que el parto sea menos doloroso. Además, oxitocina actúa también en la reducción del sangrado tras dar a luz, así como en la expulsión de la placenta.
La labor de la oxitocina no termina ahí, ya que en el posparto jugará un papel clave en tu bienestar y el de tu bebé, fortaleciendo la conexión emocional entre madre e hijo.
Oxitocina sintética, ¿si o no?
Avances científicos en la década de los 70 llegaron a la producción de esta hormona de forma artificial, como fármaco inyectable por vía intravenosa o intramuscular. Se demostró que, con ella, las contracciones uterinas eran aún más prolongadas e intensas en comparación con las que se producían naturalmente.
¿Resultado? Un parto más rápido y menos doloroso. Por eso, los centros médicos hicieron de este fármaco un imprescindible para inducir o acelerar el parto en mujeres con dificultades para iniciar o progresar. Sin embargo, su uso puede aumentar el riesgo de complicaciones, por lo que es importante que se administre de manera cuidadosa y bajo la supervisión de un profesional médico.
¿Cuándo está indicada la oxitocina sintética?
La ‘Guía de Práctica Clínica’ marca que en un parto normal nunca se debe administrar oxitocina sintética. Para administrarla, los profesionales sanitarios deben detectar primero que se trata de un parto detenido y descartar que no existan otras causas que estén paralizando el proceso natural.
Si al final se apuesta por usar el fármaco, se hará lentamente y usando la mínima dosis eficaz. Cuando el parto se reinicie, debes saber que se puede detener la administración de la oxitocina sintética, simplemente cerrado la vía. A veces es suficiente con una pequeña ayuda.
Desde MaterMap te recordamos que el contenido de este post es meramente informativo y te recomendamos la consulta a un especialista en caso de cualquier duda.